Un Enero para aventureros


    Comenzamos el año bien motivados y movidos. Tengo dos niños bien inquietos y debíamos sacarlos a pasear. Visitamos el Museo de Historia Natural cuya exposición de Dinosaurios del Sur del mundo dejó fascinado a mi enano. Descubrimos el MUT en Providencia y me sentí una Carmela volviendo a la ciudad.

    Un amigo me regaló lanas hermosas de la tienda Revesderecho para tejer mi primer chaleco de arco iris, haré una entrada para publicar el resultado. Y me motivé a tejer otro, con lanas de Reginella que me regalaron mis papás hace 2 años para un cumpleaños; para mi mala suerte no hay más en stock y me hallo solucionando las mangas sin más lanas disponible - ja,ja,ja - un desafío.

    Visitamos varios parques de la ciudad, entre ellos el Parque Inés de Suarez que siempre es una buena opción porque tiene baños y mucha sombra después de las 5 pm. Además, he podido visitar más a mis papás con los niños y pasar el rato con mis hermanos sin tener que correr para volver a casa. 

    Ha sido un mes para consentir a mi comensal que durante el periodo escolar no puede salirse del menú saludable que requiere el gobierno, hemos disfrutado de comiditas juntos y es lo que más aprecio ahora mismo de las vacaciones: su presencia. Y también estamos tolerando los momentos de aburrimiento que azota fuerte a esta familia que ya tuvo que cambiar las rutinas y no morir en el intento.

Espero que el próximo mes venga igual o más movido que éste y más soluciones creativas para mi enanito que está intenso.


Rachel.-

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